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Rechazada por sonreír en una entrevista de trabajo: cómo influye la expresión facial en un proceso de selección

Los expertos analizan la comunicación no verbal del candidato, que debe ser relajada y coherente con su discurso. Si no es la adecuada, puede llegar a influir negativamente.

Sonreír en exceso en una entrevista de trabajo puede transmitir desconfianza.
Sonreír en exceso en una entrevista de trabajo puede transmitir desconfianza.GETTY (Getty Images/iStockphoto)

La entrevista de trabajo es una de las fases más importantes en un proceso de selección. Es común que la gente prepare su mejor discurso para mostrar su valía y poder acceder al puesto. Pero hay un factor clave en este proceso más allá de lo que se pueda contar de uno mismo: el lenguaje corporal. Los gestos y la expresión facial pueden ayudar a ilustrar mejor el discurso, pero deben ser relajados y coherentes con lo que se está diciendo. En caso contrario, el candidato puede generar desconfianza o parecer que ha perdido el control.

Recientemente, una joven de Argentina denunció en Linkedin haber sido rechazada en una entrevista de trabajo por sonreír. A través de su perfil, compartió lo que le había respondido una empresa tras el proceso de selección. “Sonreíste demasiado” y “fuiste muy simpática” son algunas de las frases que recoge el mensaje, seguido de “a veces, ser extrovertido denota falta de compromiso y seriedad”.

En general, una persona que sonríe en exceso puede transmitir cierta desconfianza, según cuenta Carlota Martínez, consultora de recursos humanos de Randstad. “Es importante que el candidato muestre una buena actitud y sonría, pero una persona que fuerza mucho ciertas expresiones faciales puede transmitir falta de transparencia”, explica la experta. “Las personas no estamos sonriendo todo el tiempo, da la sensación de que no te estás mostrando tal y como eres. En una entrevista, se busca precisamente lo contrario, que las personas se muestren tal y como son, tanto para bien como para mal”.

Las expresiones faciales y la interpretación de las mismas son una parte fundamental a tener en cuenta en una entrevista. Según una investigación de la Universidad de Glasgow, el cerebro tarda solamente 200 milisegundos en interpretar la expresión facial de otra persona. Tras este minúsculo periodo de tiempo, el cerebro tiene suficiente información para predecir su estado emocional. Es importante que el candidato no transmita desconfianza pues, según Martínez, es un motivo de peso para descartar a alguien en un proceso de selección. “Puede suceder que una persona tenga un currículum que se adapte al puesto de trabajo, pero que la entrevista no vaya bien y quede descartado. Al final, trabajamos con personas”, explica.

La experta en selección también aclara que la actitud más adecuada a adoptar para enfrentarse a una entrevista de trabajo depende mucho de los valores de la empresa y del puesto al que se acceda. “Hay trabajos mas mecánicos en los que no se requiere que el trabajador sea extrovertido. Sin embargo, para un trabajo de comercial, por ejemplo, sucede todo lo contrario”, detalla. Por lo general, cuenta, la transparencia y las ganas de trabajar y aprender son los aspectos que más se valoran.

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