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Allá por 2018, cuando la vida nos parecía un caos y un sinsentido pero, en realidad, no lo era tanto (dadas las circunstancias), se descubrió que la brecha de género llegaba hasta el placer. Si la salarial era más que real y nos hacía llevarnos las manos a la cabeza, tanto o más ocurría con la brecha del orgasmo. Esto es: que, literalmente, los hombres disfrutaban, de media, de un gran mayor número de orgasmos que las mujeres (al menos, que las heterosexuales que participaron en los estudios). Había que hacer algo urgentemente y se hizo. No solo en la lucha feminista que en aquel momento se erigía más importante y numerosa que nunca, sino también en un sentido tan estricto y concreto como el de crear el juguete sexual femenino por excelencia que marcaría todo un hito en la historia de la sexualidad.
Exacto: nos referimos al succionador de clítoris -también conocido como Satisfyer, el nombre de la marca que lo catapultó al estrellato-. En 2019 se convirtió en el producto más deseado del año y en uno de los regalos más populares cuando llegaron las fechas navideñas. A diferencia de otros modelos de vibradores, supuso toda una revolución también entre las mujeres jóvenes y, por fin, dio el pistoletazo de salida a una carrera en busca del placer sin tabúes, vergüenzas ni sonrojos. Estaba ya en todas las casas y todas las conversaciones y había llegado para quedarse.
Pero la vida avanza y evoluciona y el ser humano continúa en busca de nuevos retos y herramientas innovadoras. Así que cuando el icónico Satisfyer ya hubo conquistado la mayoría de los cajones de mesitas de noche del planeta, las firmas de juguetes sexuales volvieron a diversificar sus intereses y a ofrecernos magníficos candidatos para tomar el relevo. “Los succionadores de clítoris siguen atrayendo mucha curiosidad por su foco total en el clítoris y sus avances tecnológicos, pero hemos visto que han aumentado sus ventas los juguetes controlados por App, la distancia en cuarentena y las dificultades de movilidad para ver a tu pareja han podido afectar, pero es cierto que ya venían de una tendencia positiva”, cuenta Laura Castro, PR Manager de Platanomelon, a S Moda.
Así que sí: lo que vamos a hacer ahora es controlar nuestro Satisfyer a través del móvil y dejarnos llevar por otros innovadores juguetes capaces de balancearse dentro de la vagina o simular un cunnilingus. Pero también volveremos a los inicios en su versión más sofisticada: “También se venden mucho vibradores conejitos o balas vibradoras. Su principal cualidad no es la de hacerte llegar al orgasmo cuanto antes, sino que te puede ayudar a descubrirte mejor”, añaden desde Platanomelon.