Cuerda para rato
La técnica es la misma desde hace 300 años, pero las modas y el genio marcan la diferencia. Los mejores lutieres españoles lo saben bien.
Casa Parramón es la firma de lutieres más antigua de España. Fundada en 1897 por el chelista Ramón Parramón, se asoció a principios del siglo XX con el joven ebanista Jacinto Pinto. «En una casa con una trayectoria tan larga ha pasado de todo», explica Jordi Pinto tercera generación al frente de la firma. «La época más importante de construcción fueron los años 20 y 30. La Guerra Civil y la posguerra mataron la cultura».
En la última década han reforzado su otra especialidad: restauración, reparación y reglajes de sonido. «Ahora se busca el sonido más auténtico. Intentamos formarnos continuamente y hemos invitado a los mejores especialistas de Nueva York, Londres o París», afirma.
En un principal de la barcelonesa calle del Carme, conviven tienda y taller, considerados de primer nivel internacional. ¿Ha pasado algún Stradivarius por aquí? «Alguno, sí». ¿Su secreto? «Que su creador era un genio». Ellos añaden «responsabilidad, respeto y entusiasmo».
El taller.
Mirta Rojo
La primera asociación de lutieres en España la fundó Ramón Paramón hace 25 años.
Mirta Rojo
Pau Casals, cliente desde los años 20, tenía un violonchelo italiano del siglo XVIII de valor incalculable.
Mirta Rojo
Las maderas siempre son las mismas: abeto en el bastidor y arce en el cuerpo y la cabeza.
Mirta Rojo
El arco se hace con madera de pernambuco, que mantiene la curva proporcionada al calentar la vara.
Mirta Rojo
Pigmentos y barnices naturales.
Mirta Rojo
