_
_
_
_
_

Así llegaron estas cuatro mujeres a ser altas ejecutivas en España

Ejecutan decisiones a diario, manejan equipos. Y lo hacen en puestos y sectores típicamente masculinos. Creen que hay que hacerse ver y dar modelos para acabar con los clichés

covermujeres
syx
Ana Fernández Abad

El móvil es su oficina, pero lo ignoran durante un buen rato para hablar de algo que les apasiona: la importancia de visibilizar el liderazgo femenino e impulsar la igualdad. Son mujeres que han llegado a la cúpula empresarial: Belén Frau es la CEO de Ikea Italia; Blanca Panzano, la directora general de LVMH Joyería y Relojería España y directora de TAG Heuer España; Carlota Pi es fundadora y CEO de la eléctrica Holaluz; y Ana Bujaldón, CEO y fundadora de Azul Comunicación, preside Fedepe (cuyos premios para reconocer a las profesionales que han llegado a lo más alto han celebrado su 25 aniversario). El reciente Esade Gender Monitor subraya que el 70% de las directivas considera que en España existe un trato desigual a favor del hombre para ocupar puestos de alta dirección. Ellas, con su trabajo día a día, quieren cambiar esos porcentajes.

¿Cuesta llegar a la alta dirección?

Belén Frau: Es complicado, porque estar en una posición de liderazgo siempre implica un esfuerzo, constancia y sacrificio.

Ana Bujaldón: Es difícil en general, y en particular para la mujer.

Blanca Panzano: Sí, porque requiere perseverancia, tropezar repetidas veces y seguir creyendo. Y como mujer es complejo, porque, al final, es un mundo más de hombres, donde de forma natural acaban apoyándose entre ellos.

Carlota Pi: Pero, independientemente del género, para llegar a un sitio donde merezca la pena estar siempre hace falta dedicación y formar un gran equipo.

Están al frente de sectores asociados a perfiles masculinos. ¿Cómo se puede cambiar esa percepción?

Ana Bujaldón: Las mujeres somos la mitad de la población, el 66% en los grados universitarios, los mejores expedientes… Sin embargo, en las escuelas de negocios y en las técnicas somos menos, sobre el 25%. Ahí sería importante impulsarlo.

Belén Frau: Hacen falta ejemplos.

Blanca Panzano: Que se nos dé la palabra. Eso crea el ejemplo, compartir experiencias.

Carlota Pi: Y potenciar movimientos como el He For She de la ONU; una transformación que implique a hombres y mujeres.

¿Qué puede hacer una empresa para fomentar la igualdad y que la conciliación no se quede en buenas intenciones?

Ana Bujaldón: Que en los procesos de selección incluyan mujeres, porque si no llegas a ese proceso no estás en la carrera. La conciliación muchas veces se queda en palabras. Hay que cambiar la cultura laboral: trabajar por objetivos, acabar con el presencialismo…

Belén Frau: Respetar los horarios, incluso con el teléfono. Yo los fines de semana no llamo ni mando correos. Es una cultura que va en cadena; si tú lo haces, los de abajo creen que es lo que hay que hacer.

Carlota Pi: La palabra convence, el ejemplo arrasa. Medir por productividad, no por tiempo de permanencia, ¡eso solo importa ya para los parkings!

Blanca Panzano: Se necesita mayor formación y concienciación. No hacer diferencias. No creo en los modelos de cuotas.

Pero ¿podrían ser una solución temporal? La Ley de Igualdad recomienda a las empresas contar con un 40% de mujeres en sus consejos de administración, pero solo llegan al 17,32%.

Carlota Pi: Yo no me creo que no haya un 40% de consejeras potentes en España… Ahora hace falta discriminación positiva para generar un ecosistema en el que el cambio sea posible. Una opción son las cuotas.

Blanca Panzano: Yo creo más en los perfiles, hay que impulsar las fortalezas de cada uno: concienciar a las mujeres de que no tienen que seguir los roles masculinos, que son los que han tenido delante.

Belén Frau: Mucha gente piensa que ser directiva te hace tener comportamientos masculinos, te prejuzgan. Hay que empujar ese cambio, porque estamos viendo que de forma natural no sale.

Ana Bujaldón: Habría que desmitificar la palabra cuota y crear una conciencia de que existe desigualdad. Hay estudios que dicen que cuando hay más mujeres en los equipos de dirección la rentabilidad sube hasta un 15%.

Pero cobran menos. ¿Cómo cerrar la brecha salarial?

Carlota Pi: Hay que potenciar ya los skills de negociación y de comunicación. Hace falta formación, entrenamiento.

Ana Bujaldón: Eso muestra cómo se valora el trabajo femenino. En los sectores feminizados es donde menos se cobra.

¿Es difícil acceder a la alta dirección siendo mujer?

Blanca Panzano: Por las relaciones que se hacen entre hombres se facilita más ese networking, que haya un mentoring natural.

Belén Frau: Mucho, porque el relevo natural viene de hombres.

¿Y qué formación es fundamental para ser un líder?

Belén Frau: En las carreras nos enseñan a aprender del libro, de memoria, y llegas a la empresa y te exigen resolver conflictos, hablar en público, capacidad de negociación… Se impone el liderazgo participativo.

Blanca Panzano: Hacer que cada miembro del equipo se sienta fundamental en la compañía y se pueda expresar de forma libre.

Carlota Pi: Nosotros seguimos la metodología de Verne Harnish, autor de Scaling Up. Critica el síndrome del tío más listo de la habitación: el jefe que dicta desde su podio lo que hay que hacer y no escucha.

Ana Bujaldón: Eso ya no vale, tienes que lograr que te sigan desde la convicción.

¿Se acabó el ejecutivo encerrado en su despacho?

Blanca Panzano: El modelo está cambiando, y en eso ayudan las mujeres, que son de consenso, diálogo, están preocupadas porque todos tengan voz…

Ana Bujaldón: La tendencia ahora es un estilo de liderazgo más horizontal. Hay que pelear y romper los estereotipos.

Belén Frau: Yo no tengo despacho, y con eso quiero mandar una señal: que soy accesible. Son los actos los que hablan, no lo que digas.

Carlota Pi: Cuando tú das ejemplo y desarrollas estos canales de comunicación estás creando una cultura. El reto es el liderazgo de personas: motivar, que trabajen con ilusión. Preguntar mucho y escuchar más.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ana Fernández Abad
La editora de estilo de vida de S MODA está especializada en temas culturales y personajes de actualidad. Es licenciada en Periodismo por la Universidad de Navarra y ha escrito en medios como Diario 16, El Comercio o Descubrir el Arte.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_