María Escoté: “Además de mi firma me pondría todo lo que hace Versace”

Tenemos la sensación de haber visto a María Escoté en acción recientemente… sobre todo, por su actual faceta televisiva. Pero lo cierto es que esta última temporada no presentó colección en Mercedes Benz Fashion Week Madrid. Los meses anteriores a los desfiles estuvo atareada, y no solo con la grabación de la segunda edición de Maestros de la Costura que acaba de finalizar, sino también y sobre todo con su colección más especial hasta la fecha, que presenta hoy mismo fuera del marco de las semanas de la moda: “Después de tantos años centrándome en vender, en la web… me apetecía hacer un proyecto de vuelta a los inicios, de volver a disfrutar con lo que haces. Elaborar prendas más trabajadas y hechas con mucho amor de principio a fin”. Su loable deseo se ha hecho realidad y se llama Clochard: “Es una línea de ocho prendas muy especiales, para las que he creado los tejidos desde cero. Hemos diseñado y bordado en la India cada uno. Como era tan particular me apetecía presentarlo de forma diferente y junto a Honor he podido llevarlo a cabo. Hemos documentado todo el proceso creativo con la cámara de sus smartphones y he podido trabajar con un fotógrafo al que siempre he admirado, Txema Yeste”.

La inspiración, esta vez, llega de las múltiples superposiciones de tendencias actuales, fruto de una ingente cantidad de información e imágenes que consumimos a diario, y crea prendas con una estética propia: muy elaboradas, mezclando denim con blondas bordadas y perlas, vestidos de crochet engarzados con pedrerías de Swarovski y vestidos de noche estampados con lentejuelas bordadas una a una de manera artesanal. Pero el universo creativo de María Escoté es absolutamente libre y ecléctico –le inspiran su viaje a Japón, la película True Romance o el tema Space Oddity, de Bowie– y bebe de un sinfín de motivaciones: “Todas mis colecciones hablan del momento por el que estoy pasando cuando las creo. Lo único que sé hacer es sacar lo que llevo dentro. Son como un diario a lo largo de los años”, confiesa a S Moda.

La catalana ha vestido a Rosalía, Katy Perry, Miley Cyrus o Beyoncé, además de a un sinfín de personalidades patrias, y es, sin duda, una de las diseñadoras más influyentes de la moda española. Pero se quita méritos: “Todos aportamos algo. Esta es una profesión muy dura y hay mucha gente joven empezando que va muy fuerte”. Habla, por ejemplo –lo relacionamos al instante– de su amigo y compañero Palomo, con quien comparte proyecto y objetivo en el programa de televisión española. “El balance de todo lo que hemos vivido ha sido muy positivo. Queremos mostrar una profesión, un oficio que jamás hasta ahora se había visto. Después del programa nos conoce más gente y se valora más el oficio. Además nuestros equipos son pequeños y salir durante tres meses es como un curso intensivo, es impregnarte de lo nuevo: de la experiencia y los conocimientos de Caprile y de la juventud y la innovación de Palomo. Nos compenetramos muy bien a todos los niveles”.

Su participación en el programa, que ya ha confirmado su tercera temporada para 2020 con el mismo jurado, ha resultado sorprendente: “Yo soy la parte más creativa y quizá más empresarial, y como jurado he sido más dura de lo que esperaba”. La autoexigencia y el carácter han sido sustanciales a lo largo de su carrera, ¿quizá por ser mujer?… cabe la cuestión. “Sería injusta si dijese que he encontrado problemas en mi carrera por ello. Pero los hay y tenemos que luchar contra ellos. Mis compañeros hombres y las marcas con las que he trabajado siempre me han tratado muy bien y creo que es porque nuestra generación somos hijos de madres luchadoras y fuertes que nos han criado desde la igualdad”. Y ese es, precisamente, el camino por el que María está guiando a sus dos hijas, Alabama y Lila, en la sociedad de hoy: “Creo que lo que está de nuestra parte es la educación. Me siento muy orgullosa de ver cómo mis amigos educan a sus hijos chicos igual que yo a mis hijas chicas. Tenemos unos valores que creo que estamos transmitiendo y que son la clave para lograrlo”.

Mientras concilia e intenta invertir en calidad cuando pasa tiempo en familia, trabaja largas e innumerables horas en nuevos proyectos como Clochard y en ir siempre un paso más allá para sorprendernos. Como cuando nos cuenta cuál es su prenda fetiche –“Los zapatos. Es la pieza que me identifica como persona: no hay una María Escoté diseñadora diferente, soy solo una y no lo puedo separar”. O cuando asegura que se pondría todos y cada uno de los diseños que saca a la pasarela… «Tengo mi estilo muy hecho, pero quizá de Versace también me pondría casi todo, es de mis marcas favoritas”. Pero, sobre todo y por fortuna, cuando comparte lo que quiere seguir haciendo durante muchos años: “Mi sueño sería vivir en una casa en el campo rodeada de naturaleza, crear desde allí y vender en todo el mundo. Pero tener mi estudio allí, seguir trabajando”.