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Las aventuras de una española en Parsons

Hablamos con Isabel Río, recién graduada en el prestigioso Máster de diseño de moda, que solo acepta cada año a 18 estudiantes.

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En un loft de la Gran Manzana, Parsons presentó una innovadora exposición con el trabajo de sus estudiantes élite entre los que, por primera vez, se encuentra el nombre de una española.
Isabel Río forma parte de la segunda -y recién graduada- promoción del exclusivo Master en Diseño de Moda y Sociedad que tan sólo acepta por curso a las 18 candidaturas más excepcionales procedentes de los cinco continentes. 

¿El objetivo? “Ir más allá. Parsons se basa en la fuerza de la superación. Cada promoción es brillante, pero los estudiantes de un curso inferior se preguntan cómo pueden hacer más, cómo pueden hacer mejor, cómo puedo hacer algo diferente y siempre se desafían a sí mismos. Es llegar más allá, donde antes nadie ha llegado. Y el programa es un gran ejemplo de esta filosofía”, señala en exclusiva a SModa Simon Collins, el decano de la facultad de moda de la prestigiosa universidad.

Collins lo tiene claro y no duda en señalar que el Master en Diseño de Moda y Sociedad  es “el estudio más elevado en moda de Estados Unidos y muestra de ello es que prácticamente cada uno de los graduados de la primera promoción fue fichado por uno de los grandes diseñadores”, entre los que figuran Donna Karan, Narciso Rodríguez o Ralph Lauren.

Pronto le llegará el turno a Isabel Río quien la pasada semana mostró en primicia su primera colección en la apertura del evento de Parsons, apadrinado por la diseñadora Diane Von Furstenberg. “Es una exposición extraordinaria. Realmente maravillosa, innovadora y dinámica. Estoy muy impresionada con la imaginación y la elaboración” del trabajo de los graduados, remarca Furstenberg, también presidenta del Consejo de Diseñadores de Moda de América (CFDA, por sus siglas en inglés).

A lo largo de ocho looks, Río construye “Un-Making”, una optimista colección donde los interiores de las prendas se convierten en los exteriores de las mismas sin dejar al lado su gran especialidad basada en los “prints”.

“Es una colección fácil, alegre y cómoda para una mujer con carácter”, nos explica esta coruñesa, quien antes de entrar en Parsons ya contaba entre su currículum con firmas de la talla de Carolina Herrera, Alexander McQueen, Pedro del Hierro o el estilista de Victoria’s Secret Todd Thomas.
El espíritu de superación y no tomar un “no” por respuesta ha sido decisivo en la trayectoria de esta diseñadora de 31 años, quien, sin estudios previos en la industria y con una edad superior a la de media, se hizo lugar en el “Harvard” de la moda.

“Conseguí hacer una entrevista con uno de los profesores de la escuela que después de ver mi portafolio me dijo que no valía para nada y que me daba dos semanas para presentar algo que valiese la pena… en dos semanas presenté mi nuevo trabajo y quedé pre-seleccionada. Fue un proceso muy largo y muy costoso hasta que me llegó la carta de aceptación a mi casa de Madrid”.

La belleza de la costa gallega sirvió de inspiración para los estampados de la primera colección de la diseñadora de Ortigueira, quien confiesa, que echa “demasiado de menos” a su familia y amigos,  pero hoy en día no cree que regresar a España sea una opción.

Mirando hacia atrás, Río analiza su experiencia en el aclamado Máster que describe como “muy dura” y “terriblemente competitiva porque hay mucho talento y la escuela exige que seas siempre el mejor”. “He dedicado dos años de mi vida completamente a Parsons y a mi proyecto. He hecho grandes amigos que han hecho todo menos duro y de los que he aprendido mucho, casi más que de los profesores”. Sin embargo, para la española, el mayor desafío de los últimos 24 meses ha sido “la presión por la reputación creciente del programa”,  del que se espera que surjan las nuevas promesas del diseño de Estados Unidos.

Como las grandes casas de la moda americana, Río ya piensa en la Semana de la Moda de Nueva York donde este mes de septiembre tendrá el privilegio de presentar su colección adaptada para pasarela, junto al resto de sus compañeros.

Y ahora, ¿qué viene después de Parsons? “Trabajar en una firma que me guste y seguir aprendiendo. Tengo muchos nombres en la mente, como Narciso Rodríguez o Proenza Schouler, y a la vez ninguno porque todavía no he asimilado que esto es real después de tanto esfuerzo. Algún día me gustaría tener mi propio nombre y, sobre todo, que la gente se ponga mi ropa. Al final, ese es el mejor premio para un diseñador”.

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