La primera edición de Cibeles en la que no queda ni rastro de su castizo apodo en el nombre oficial (Mercedes Benz Fashion Week Madrid) abre precisamente homenajeando lo anglosajón: el diseñador gallego Roberto Verino se ha rendido en su colección al glamour de Nueva York. Desde las alusiones al Gran Gatsby, a los rascacielos y al Art Déco hasta la gran manzana de los años 70 y los peinados punk de los 80.
Sobre la pasarela se han visto pailletes y estampados de pitón, pero también sastrería europea y esmoquines femeninos. También chubasqueros transparentes y paraguas (un "homenaje a la excentricidad de sus transeúntes"). Ellos -representados por Jon Kortajarena- son hombres de negro con chaquetas de terciopelo listos para salir de noche. Y todo, con muchos acabados en piel, para sobrevivir al frío urbano.








