Si el vestido de la contrayente lo firman finalmente las petites mains de Arteixo (el traje del novio se confirma que es de Massimo Dutti), no sería nada raro que el dresscode demandado a los más de 250 invitados a la boda de Marta Ortega y Sergio Álvarez, oficiada mañana a hora indeterminada en el municipio de Cambre, pasara por vestir de Inditex.
De la misma manera que resulta absurdamente divertido imaginar qué modelos nos pondríamos para asistir a esos eventos a los que nunca estaremos invitadas si pudiéramos y quisiéramos comprar vestidos de Chanel, Oscar de la Renta o Alexander McQueen, el ejercicio a la inversa, qué elegirían Athina Onassis o Carlota de Mónaco (no se ha confirmado su asistencia pero sí se especula con que irán) si tuvieran que aparcar sus mejores galas y rebuscar en Zara, es superdistraído: pruébenlo en sus casas.