Poco le duró a Zac Posen la aventura europea que emprendió en septiembre de 2010: solamente dos temporadas aguantaron sus colecciones en el calendario de la moda parisina. Al chico que quería ser Saint Laurent se le fue la osadía de las manos y ha vuelto a casa para centrarse en esa fórmula, mucho más abarcable, que pasa por vestir a sus amigas celebrities sobre las principales alfombras rojas.
Sus vestidos fueron algunos de los más solicitados en los Globos de Oro y a juzgar por la tónica de los diseños de noche vistos ayer durante su desfile de otoño-invierno 2012/13, casi todos de silueta sirena o ball gowns en lustrosos y minerales colores, la mayoría pasará directamente del backstage a manos de las actrices nominadas a los Oscar.
