Para todos los cuerpos y tallas: 080 Barcelona Fashion reivindica una moda diversa y sostenible

Diversidad, sostenibilidad y circularidad. Los tres conceptos que marcan la moda del presente y del futuro han sido los protagonistas de la 31ª edición de 080 Barcelona Fashion. El Recinto Modernista de Sant Pau acogió desde el pasado 2 de mayo hasta el día 5 las propuestas de 25 diseñadoras, diseñadores y marcas comprometidos con los valores que deben guiar el camino de la industria y que consolidan esta plataforma como referente en el sur de Europa. Bajo las apabullantes cristaleras y mosaicos de este espacio patrimonio de la UNESCO vieron la luz creaciones marcadas por una atemporalidad garantía de una moda más sostenible y duradera.

Entre firmas perennes en el calendario y nuevas incorporaciones, un total de 25 diseñadoras, diseñadores y marcas presentaron sus colecciones: 404 Studio, Anel Yaos, Bielo_Oscarleon, Compte Spain, Custo, Dominnico, Eñaut, Escorpion, Free Form Style, Habey Club, Laretta, Lebor Gabala, Lola Casademunt by Maite, Menchen Tomas, Nathalie Chandler, Outsiders Division, Paolo Leduc, Reveligion, Rita Row, Simorra, The Artelier, The Label Edition, Txell Miras, Victor Von Schwarz y Yolancris fueron los nombres que materializaron una apuesta por la moda para todos sin importar tallas, cuerpos o género. Las propuestas más eclécticas y vanguardistas se mezclaron con opciones atemporales reafirmando la posición de privilegio de 080 Barcelona Fashion y su compromiso con una moda responsable.

Esa fue precisamente la apuesta protagonista de esta edición. El 5 mayo, día de clausura, se celebró por primera vez un desfile de moda inclusiva que, a través de la marca Free Form Style y en colaboración con el diseñador Manuel Bolaño, visibilizó la importancia de sensibilizar sobre la neutralidad corporal y la diversidad funcional. Los 16 modelos que pisaron la pasarela, algunos con movilidad reducida, pusieron rostro a la temática central de la edición luciendo diseños que bebían de la sastrería inglesa con guiños a los movimientos punk y new romantic. La acción, llevada a cabo por el Consorci de Comerç, Artesania i Moda de Catalunya (CCAM) con la colaboración del Institut Català de les Dones (ICD) y que está enmarcada en el plan de actuaciones previstas en el Plan de Acción impulsado por el Gobierno a través del ICD para combatir la presión estética 2023-2026, respondía a la intención de «dignificar todo tipo de cuerpos», según las fundadoras de la marca Marina Vergés y Carolina Asensio. Pero más allá de esta novedad, la edición estuvo marcada por un casting basado en la inclusión, la diversidad y la multiculturalidad con nombres como la modelo de talla grande de ascendencia africana Chelsea Princess.

El uso de tejidos reciclados y sostenibles o la apuesta por prendas y colecciones cada vez más atemporales fueron la fórmula mediante la que muchas firmas, tanto consagradas como emergentes, quisieron posicionarse a favor de la sostenibilidad y la moda circular y duradera. Así pudo comprobarse en la primera jornada de desfiles en la que Simorra, The Artelier, Laretta, Bielo_Oscarleon y Escorpion presentaron sus propuestas. Esta última, habitual del calendario edición tras edición, volvió a poner de manifiesto que un jersey es un básico imprescindible en cualquier armario y que, lejos de pasar de moda, puede reinventarse partiendo siempre de la herencia y saber hacer de una etiqueta con casi un siglo de historia. El tacto también fue leitmotiv de la propuesta de Simorra, en la que no faltaron técnicas ancestrales como el macramé ni tejidos tan atemporales como los algodones bordados o los guipures geométricos que recordaban a las baldosas hidráulicas del pasado.

Por su parte, The Artelier, Laretta o Bielo_Oscarleon fueron perfectos embajadores de lo que las firmas emergentes pueden aportar a la industria. Sirvan como ejemplos los grandes contrastes en cuanto al color, las texturas y los volúmenes de las prendas de Laretta, que fueron lucidos por modelos de todas las edades y tallas, o los estampados de The Artelier, firma sin género, sin barreras y atemporal, que utiliza tejidos ecológicos y sostenibles y que en esta ocasión reflexionó sobre el paso del tiempo a través de creaciones que parecían deshacerse. La experimentación alcanzó su punto álgido en esa primera jornada de la mano de Bielo_Oscarleon, firma que utiliza técnicas de tejer inventivas para crear estructuras inusuales y volúmenes inesperados que carecen de género y funcionan, como pudo comprobarse en su desfile, en cualquier cuerpo y a cualquier edad.

La segunda jornada dio comienzo con una colección inspirada en la burguesía parisina de los noventa firmada por la diseñadora belga Nathalie Chandler. Afincada en Barcelona, la creadora se estrenó en la plataforma catalana siendo fiel a su estética rock y rompiendo los códigos del armario femenino a través de prendas deconstruidas. También la enseña 404 Studio pisó por primera vez la pasarela de 080 Barcelona Fashion con una propuesta rupturista: la cultura quinqui de la España de la Transición fue el punto de partida para referenciar a célebres figuras como Quique San Francisco, el ‘Jaro’, el ‘Vaquilla’ o Lola Flores y su hijo Antonio Flores. ¿La traducción? Prendas atrevidas en las que se mezclan referencias a la sastrería o la lencería y en las que no faltan detalles artesanales como las flores de crochet hechas a mano. También las flores protagonizaron parte de la colección de Victor Von Schwarz, que partiendo del Hollywood de los setenta combinó denim con tweed y tejidos encerados haciendo del eclecticismo su bandera.

Firmas habituales en el calendario como Lebor Gabala, Txell Miras o Menchen Tomas confirmaron su defensa de las prendas versátiles capaces de acumular varias vidas en la segunda jornada de desfiles. Si en Lebor Gabala las piezas que pueden llevarse del día a la noche –abrigos de lana de alpaca, jerséis de cashmere o pantalones de pana, terciopelo o sarga de lana– fueron las grandes protagonistas; en Txell Miras el abrigo se convirtió en la pieza más relevante del armario siendo el único elemento sobre el cuerpo desnudo de modelos alejadas de los pretéritos cánones estéticos. La jornada fue clausurada por la alegría circense de Mechen Tomas, que presentó una propuesta repleta de volantes, blondas, camisas globó, corsés y tocados inspirados en el circo y su mágico universo.

Los volúmenes en su máximo esplendor marcaron la pauta en la tercera jornada de desfiles. Con The Label Edition y sus mangas jamón sobredimensionadas a la cabeza, la pasarela se convirtió en territorio de prendas grandilocuentes, superposiciones y patrones deconstruidos. Ahí estaban, por ejemplo, los plumíferos de Custo Barcelona, rey de las piezas arquitectónicas, los colores potentes y los metalizados a cualquier hora, o los lazos XXL de Anel Yaos, que exploró su obsesión infantil por las criaturas marinas a base de superposiciones y contrastes entre tejidos tan livianos como la seda o el algodón con la contundencia del terciopelo o el neopreno. Para lucirlos el diseñador contó con rostros tan mediáticos como Dovima Nurmi, concursante de la primera edición del formato Drag Race España, que subrayó la diversidad presente en toda la edición. También el contraste de materiales –del terciopelo a las transparencias pasando por prendas de punto acompañadas por complementos contundentes– estuvo presente en la propuesta de Compte Spain, que abrió el calendario de la tercera jornada.

El día avanzó de la mano del eclecticismo presente en la colección de Outsiders Division (remiendos de crochet, un vestido de dálmata, osos pintados al óleo o un sombrero con forma de zanahoria) y las piezas deconstruidas y agujereadas de Paolo Leduc, que quiso explorar tanto sus raíces españolas como su lado francés sin olvidar el mundo del grafiti del que proviene. El broche lo puso uno de los creadores mas mediáticos del momento, Dominnico. El encargado de vestir a divas de la música como Rosalía o Lady Gaga reinterpretó algunas de las piezas más icónicas de su joven firma mirando a corrientes artísticas como el dadaísmo de Marcel Duchamp, el arte conceptual de los hermanos Jake y Dinos Chapman o la provocativa estética de La Naranja Mecánica, de Stanley Kubrick, entre otras referencias. ¿El resultado? Prendas con guiños al mundo del motor, siluetas de cortes asimétricos y aberturas estratégicas coronadas por elementos propios de la temática BDSM en las que tampoco faltó el isologo de la firma.

Tras el desfile de Free Form Style, que inauguró la última jornada del calendario, vieron la luz las creaciones de Rita Row, Reveligion, Havey Club, Lola Casademunt by Mayte, Eñaut y Yolancris. Algodón orgánico, denim premium, hilos italianos, lana virgen o fibras recicladas fueron algunos de los tejidos que materializaron el universo de Rita Row, un compendio de prendas para vestir en cualquier momento y lugar influenciadas por el western occidental. La pasarela acogió después las propuestas de Reveligion –protagonizadas por el grafiti, las tribus callejeras y el arte urbano– y Havey Club –una reflexión sobre el paso del tiempo simbolizado en las lazadas en los cordones de los zapatos– para dejar paso ya entrada la tarde a Lola Casademunt by Mayte. Esta última, salpicó con toques neón un armario protagonizado por el negro que, junto al animal print y a la logomanía recurrente en la firma, dibujaron un otoño-invierno 2023/2024 tan urbano como atrevido. Eñaut coincidió en conceder al negro y a los colores flúor todo el protagonismo en una colección pensada con el propósito de denunciar y crear conciencia sobre las altas temperaturas que nos asolan. El cierre de la jornada y la edición, justo antes de la fiesta de clausura, corrió a cargo de una firma habitual de la 080 Barcelona Fashion: Yolancris. La técnica del gofrado adaptada a tejidos como el tafetán de seda o el raso dejó un sinfín de vestidos coronados por grandes volúmenes que bien podrían verse en las próximas alfombras rojas. Una propuesta festiva acorde a la fiesta que minutos después puso fin a una edición imperdible para una industria de la moda comprometida y con valores.

Para hacerlo posible, el acontecimiento ha contado con el apoyo de cuatro patrocinadores y doce firmas colaboradoras. Los patrocinadores fueron Kevin Murphy (peluquería oficial), MAC Cosmetics (maquillaje oficial), Moco Museum (contenidos culturales oficiales) y Nobu Hotel Barcelona (hotel oficial). En cuanto a los colaboradores, las marcas que participaron en esta ocasión fueron: Thuya Professional Line (manicura oficial), Cointreau (licor oficial), Gin Gold (ginebra premium oficial), Vallformosa (cava oficial), Rowenta (planchado e higienización oficial), Natur All (agua oficial), La Roca Village (destino de moda oficial), INCAVI (Institut Català de la Vinya i el Vi), DO Catalunya, DO Montsant i DO Penedès (vinos oficiales), y Formatges Can Pujol (queso oficial).