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«Energía de pene pequeño»: la inesperada respuesta de Greta Thunberg al ataque del incel Andrew Tate

El polemista, que ha regresado a Twitter gracias a Elon Musk, buscaba promoción para Ferrari y Bugatti pero la estrategia misógina y negacionista se le ha dado la vuelta.

Greta Thunberg Meets Dippy The Dinosaur At The Natural History Museum
Tim Whitby (Getty Images)

Andrew Tate es uno de esos polémicos personajes de cuya existencia no tendríamos ni idea de no ser porque las redes sociales le han proporcionado canales a los que arrojar sus ideas tóxicas y misóginas: luchador de kickboxer con una discreta carrera, su fama se debe esencialmente a su presencia en la edición británica de Gran Hermano, a los episodios de violencia de género de los que ha estado jalonada su carrera pero sobre todo a su militancia incel y conspiranoica. Su defensa de Harvey Weinstein y de la idea de que la responsabilidad de las violaciones es también de las víctimas, le granjearon enormes críticas en su momento, aunque fue su incitación al odio lo que finalmente le valió la cancelación en todas las plataformas que existen y de las que formaba parte: You Tube, Tik Tok y Meta (es decir, Facebook e Instagram) no le permiten acceder desde agosto. Twitter le ha vetado también en varias ocasiones aunque siempre ha conseguido regresar: en 2021 consiguió infiltrarse en una campaña de  promoción encubierta de la firma de automóviles Bugatti, aunque cuando se descubrió el engaño volvió a ser expulsado.

Desde entonces había estado fuera de la red que ahora es propiedad de Elon Musk quien, el pasado noviembre, le permitió regresar. Él ha aprovechado la oportunidad para seguir buscando protagonismo usando el mismo discurso misógino y negacionista que le ha caracterizado siempre. En su último gran movimiento viral, que de nuevo se presenta claramente como un ardid publicitario de dos marcas de automóviles, el polemista parece haber pensado: ¿Qué mejor objetivo que la activista medioambiental Greta Thunberg para matar dos pájaros de un tiro? Lo que ocurre es que el tiro le ha salido por la culata. 

Tate se dirigió de forma específica a Thunberg para decirle: “Hola Greta Thunberg. Tengo 33 coches.  Mi Bugatti tiene un turbo 16 8.0L [en referencia al enorme gasto de combustible que genera]. Mis dos Ferrari 812 competizione tienen 6.5L v12s. [lo mismo]. Esto es solo el comienzo. Por favor, dame una dirección de email de forma que te pueda mandar una lista completa de mi colección de coches y sus enormes emisiones”. 

A lo que ella contestó solo unas horas después: “Sí, por favor, ilumíname. Mándame toda la información a energíadepenepequeño@búscatelavida.com”

La contestación de Greta ha sido una absoluta conmoción en la red social donde ha conseguido 51.000 retuits y 200.000 likes en menos de una hora. El ex luchador de Kickboxing ha logrado la repercusión global que buscaba las marcas de automóviles que promociona pero no en el sentido esperado. 

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