Russell Westbrook, el icono de estilo de la NBA aterriza en España

“Me encantaría diseñar una camiseta de baloncesto. O que tuviéramos uniformes de Balmain, Givenchy o Dior. Sería mucho mejor”. Con esta declaración de intenciones contestaba la estrella de la NBA, Russell Westbrook, a la nueva política de la liga que incluirá publicidad en su camisetas. Difícil dejar más claro, este doble MVP del All-Star, la pasión por dos facetas que lidera tanto dentro como fuera de las pistas. En la cancha, es el emblema de los Oklahoma City Thunder, una de las franquicias punteras en la mejor liga del mundo. Cuando se despoja de la camiseta de tirantes, Westbrook es todo un icono de la moda masculina, ocupando su puesto en el front row de la Semana de la Moda de Nueva York o París junto a personalidades como Anna Wintour y haciendo sus pinitos como diseñador. Ahora, el base llega a nuestro país para disputar dos encuentros de los NBA Global Games Europe. Este 3 de octubre en la capital ante el Real Madrid, el próximo día 5 en la ciudad condal para enfrentarse al F.C. Barcelona. En S Moda queremos homenajear a la influyente estrella que ha aunado dos mundos que siempre se miraron con recelo, la moda más exclusiva y el deporte de alto nivel. Altísimo, que esto es la NBA.

No domina todas las posiciones de la pista como Lebron James, ni cuenta con el virtuosismo técnico del último fenómeno de la liga, Stephen Curry. Ha sido su extraordinaria competitividad la que le ha convertido, a sus 27 años, en una indiscutible estrella de la liga. Sin embargo, ser un icono de moda era la último que se podía esperar de un jugador como Russell Westbrook. Su modo de juego incansable, furioso, casi brutal, poco tiene que ver con sus cada vez más sofisticados y eclécticos estilismos, que caminan desde los aires hipsters y colegiales con polo y gafas sin cristales hasta el look de vaqueros y camisetas rotas. Es el máximo referente del camino que siguieron varios de los jugadores más renombrados de la NBA cuando desde la liga se estableció un código de vestimenta en 2005, prohibiendo el estilo rapero más ‘gangsta’. En el caso de Westbrook, el interés por los looks estudiados, osados y fieles a las tendencias se hizo mucho más notable que en otros compañeros. El USA Today escribió un artículo estimando el coste de todos los estilismos vestidos por el base los días de partido en unos 300.000 euros. Él lo desmintió: “Esa cifra ni se acerca. No pago por mucha de la ropa que llevo (son frecuentes los préstamos y regalos a celebridades de este tipo), así que no es verdad. No la sé con certeza, pero no todo lo que compro es exclusivo. Voy de compras a Zara y a cualquier sitio”.

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Pero uno de los hombres con más estilo del mundo para la edición estadounidense de la revista GQ, que por cierto se autoproclama a sí mismo “rey de la moda”, vive con igual pasión ambas realidades, consiguiendo unirlas en un mismo escenario. Desde que aterrizó en la liga, su llegada al vestuario en cada partido se ha convertido en una cita imprescindible para la prensa deportiva y de moda, sorprendiendo siempre con sus arriesgadas apuestas. “La moda siempre me interesó, así que decidí tomármela en serio, moverme en esa dirección conociendo a la gente correcta, ya sea acudiendo a shows o reuniones. Tener la oportunidad de asistir a ellas y conseguir esos contactos me han permitido hacer lo que hago ahora”, declaró en una entrevista, después de haberse dejado ver en la primera fila de la pasarela sentado junto a personalidades como Anne Wintour, Mario Testino y modelos como Irina Shayk, Emily Ratajkowski y Nina Agdal. Dior, Jeremy Scott, DKNY o Givenchy son solo algunas de las firmas que cuentan con él entre sus invitados y que le hemos visto vestir.

El interés de Westbrook por la moda ha pasado de ser una mera afición a materializarse en los últimos días. Aunque ya tuvo experiencia como asesor estilístico en una colección para Barneys, este mismo mes da un paso más allá con su propia colección cápsula para True Religion. Las claves de las 17 prendas que componen el lanzamiento son los pantalones con rotos en la rodilla, las beisboleras contemporáneas y las camisetas largas que se mezclan con prendas más básicas con el emblema más característico de Westbrook “Why not? (¿Por qué no?)”. “Es en lo que creo y lo que me ha llevado hasta donde estoy, tanto en la moda como en todo lo demás, es un lema por el que apuesto”. Por supuesto, tratándose de una colaboración con True Religion no podían faltar los vaqueros: deshilachados, plagados de rotos… no van a decepcionar a los amantes de los jeans. En la presentación, el líder de los Thunder dejó clara su total implicación en el diseño de cada prenda y aventuró un futuro en la industria una vez se retire del deporte: “Para mí el baloncesto es solo una plataforma para hacer cosas diferentes. No quiero que la gente diga: ‘Oh, ese es Russell Westbrook, juega al baloncesto’. ‘No, ese es Russell Westbrook, hace de todo’.

Más le vale hacer de todo este año también en la pista. El californiano se enfrenta a un año decisivo en su carrera. Tras rondar durante un lustro el anillo de campeones sin conseguirlo, su inseparable pareja, el estelar jugador Kevin Durant, ha abandonado la plantilla para unirse al equipo de moda, que les batió en la pasada temporada, los Golden State Warriors. A pesar de la terrible baja para el equipo, Westbrook decidió ser leal a los Thunder y no abandonar el barco, renovando este mismo verano. Ahora, sin Durant, su rol de líder parece tan incontestable que es el máximo favorito en las apuestas para convertirse en el MVP de la liga la próxima temporada. Para sus aficionados, el gesto del base tiene tal valía que hasta han recogido firmas para cambiar de nombre un pueblo por el apellido de su estrella. Para otro entendido de este deporte, Westbrook es su vivo reflejo: “Soy yo hace 30 años. La actitud, el intentar validarte a ti mismo, demostrar tanta pasión por el baloncesto… Ves todas esas cosas en su juego. Viéndole puedes decir que ama este deporte, juega con energía y clase”, dijo recientemente un tal Michael Jordan. Energía y clase, en la pasarela y en las canchas. Westbrook desfila ahora también en las de nuestro país. Busquen su sitio en el front row.