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Nick Jonas, de defensor de la castidad a sex symbol

A sus 22 años, el ex chico Disney reclama su sitio y presume de talentos con un sorprendente cambio de actitud.

jonas

La transición de ídolo adolescente a estrella adulta suele culminar con éxito cuando estos adoptan una actitud impropia de su gloria juvenil. Si quieren pintar algo los niños buenos deben mostrar su cara más salvaje. Y si el héroe teen redobla la apuesta y deviene además en un macarra algo obsceno el éxito está más que asegurado. Las metamorfosis de Miley Cyrus o Justin Bieber son casos paradigmáticos, aunque hay otros que se lo toman con más calma. El actor Daniel Radcliffe optó por desnudarse en la obra de teatro Equus –sin drogas ni más zarandajas– y la cantante Ariana Grande prefirió arremeter contra sus fans y desearles la muerte. Todo sirve para alejarse de la candidez. La última chulería llega de la mano del cantante y actor estadounidense Nick Jonas (Dallas, 1992), exmiembro del grupo Jonas Brothers, quien para dar visibilidad a su nuevo trabajo en solitario ha decidido posar semidesnudo para la revista estadounidense Flaunt.

Este exempleado de la factoría Disney y remoto defensor de la castidad antes del matrimonio con anillo a juego–, ha decidido articular su transición a través de la insolencia. Flaunt lo retrata como un Mark Wahlberg del siglo XXI, el actor y cantante que alcanzó la fama en la década de los 90 ejerciendo de niño malo con su grupo Marky Mark & The Funky Bunch y su trabajo como modelo para Calvin Klein. "Compartimos la misma estructura muscular, por eso decidimos que Wahlberg fuera la inspiración para la sesión de fotos", confesaba Jonas la semana pasada al Boston Magazine.

Nick Jonas en una imagen de la sesión para la revista ‘Flaunt’ y Mark Wahlberg en una campaña para Calvin Klein en 1992.

vía Flaunt / Calvin Klein

La entrevista que acompaña a las fotos revela numerosos aspectos de su remozada personalidad. Jonas se confiesa "dispuesto a todo" y dice cosas supuestamente provocativas, como que le gustaría que los fans escucharan sus canciones "cuando hacen el amor". En su conversación con el periodista que lo interroga, este le ofrece un gin tonic y el cantante lo rechaza educadamente. "Lo bebo en contadas ocasiones porque tiene muchos carbohidratos". Pese a los esfuerzos, parece que su traje de rebelde sin causa todavía precisa algunos ajustes. Jonas prefiere centrar la charla en su primer disco en solitario, a la venta en noviembre. "El componente estético de las canciones es algo prioritario para mí: cómo va a sonar, qué va a significar…", explica.

El álbum lleva por título su propio nombre y ya ha presentado dos temas, Chains y Jealous. Los videoclips de las canciones están repletos de referencias sobre la necesidad de dejar atrás la inocencia y madurar. "Nuestras imperfecciones nos humanizan y nos unen como personas", confiesa Jonas a Flaunt. Todo apunta a que el portentoso físico que gasta va en consonancia con su sentido común. O al menos lo parece. La sorprendente conversión del cantante sigue los pasos de otros coetáneos, aunque esta vez parece que la decisión de mostrarse como un sex symbol es compatible con cierto carácter reflexivo.

Members of the pop music group Jonas Brothers pose at the Kids' Choice Awards in Los Angeles
MARIO ANZUONI (REUTERS /Cordon Press)

Joe, Kevin y Nick Jonas en los premios Kids’ Choice Awards en 2008.

Cordon Press

Hace tiempo que sus hermanos Kevin y Joe dieron el paso de zafarse de las cadenas adolescentes de Jonas Brothers, el grupo que durante seis años les llevó a recorrer el mundo con sus giras. Publicaron cinco álbumes de estudio, rodaron varias películas y participaron en una docena de series de televisión. Todo ello bajo el amparo del gigante Disney. Compartieron proyectos con Miley Cyrus y Demi Lovato, dos ilustres representantes de la multinacional, y fueron recompensados con decenas de premios musicales. Hace un año anunciaron su separación como grupo, pero tiempo atrás las vidas de los tres hermanos ya discurrían por caminos diferentes. Kevin, el mayor, protagonizó un reality junto a su esposa en 2012; y Joe, el mediano, comenzó su carrera en solitario en 2011. En una carta abierta remitida al New York Magazine, este último confesó hace unos meses que Disney cercenó su juventud y que Cyrus y Lovato lo introdujeron en las drogas. Ese parecer, suyo y solo suyo, no recibió el apoyo público de sus hermanos ni tampoco de las aludidas.

Nick Jonas prefiere omitir los detalles de aquella etapa. En la entrevista de Flaunt pasa de largo por su época de ídolo adolescente. Ahora quiere ser como Mark Wahlberg. Posa y canta, como él. Y también actúa. Como Wahlberg. En una semana estrena Kingdom, una nueva serie de diez capítulos para DirecTV. Si no se despista, el futuro le espera con los brazos abiertos. Aunque para ello deba legitimar sus lógicas aspiraciones quitándose la camiseta. Daniel Radcliffe y Zac Efron ya pasaron por eso. Puede que algunos lo consideren un regalo para la vista, pero como bien apunta Caitlin Moore, del diario The Washington Post, "no debemos olvidar que estos actores se ven obligados a desnudarse para ser tomados en serio". Seguro que a los fans les da lo mismo por qué lo hacen.

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