Los 5 peinados de los Oscar que deberías fichar
Del triple moño de Rooney Mara a la trenza de Olivia Wilde. Estos son los looks de belleza más especiales de la alfombra roja.
La alfombra roja de esta edición no nos deja ni los estilismos más sorprendentes de la historia de los Oscar ni los más bonitos, acertados o espectaculares. Entre un buen puñado de vestidos algo descafeinados y algún que otro derrape, nos centramos en los looks de belleza de las invitadas para buscar los peinados más especiales e inspiradores. Estos son nuestros favoritos:
1. La trenza + moño de Olivia Wilde
El mejor complemento al impresionante Alta Costura de Valentino que lució Olivia Wilde fue su trenza lateral terminada en moño. Uno de los peinados más bonitos y especiales de la noche que dejó el protagonismo a la espectacular espalda del diseño.
2. El moño doble de Daisy Ridley
Siguiendo la estética de Rey, su personaje en El despertar de la fuerza, Daisy Ridley lució un recogido pulido coronado por una especie de moño doble. Aunque la actriz quizá esté más favorecida con el pelo suelto, el peinado se convirtió en uno de los más originales de la noche. De su Chanel cuajado de pedrería sobran los comentarios. Perfección.
3. Los tres moñitos de Rooney Mara
Fiel a su marcada estética en la que los labios oscuros y la tez pálida son ya sus señas de identidad, Rooney Mara sorprendió con tres pequeños moños que también nos recuerdan al peinado de Rey en Star Wars. No se llevó el Oscar por su interpretación en Carol pero se lleva nuestro premio al peinado más especial de la alfombra roja.
4. La melenita recogida de Charlize Theron
No siempre es fácil peinar una melena corta más allá de lucirla suelta. Charlize Theron dio una lección sobre cómo transformarla en un pequeño recogido discreto, elegante y atemporal.
5. El ‘long bob’ de Jennifer Lawrence
A simple vista su peinado no tiene nada de especial. Y es eso lo que lo convierte en favorecedor. El corte bob de Jennifer Lawrence es fuente de inspiración y la versión ultralisa que lució en los Oscar se convierte en objeto de deseo instantáneo.
