Joan Collins: el inesperado regreso de la diva más malvada de los 80
La mítica actriz de Dinastía protagoniza la portada de la revista británica Tatler. A sus 85 años, la que fue una de las mujeres más sexys de su generación, sigue espléndida entre plumas y diamantes.
Para muchos, Joan Collins siempre será la seductora villana Alexis Carrington de la popular serie Dinastía. Ya han pasado varias décadas, y la británica sigue interprentando nuevos papeles, sesiones de fotos y portadas como la de ‘Tatler‘, donde entrevistan a esta diva de 85 años y recuerdan sus momentos más glamurosos sobre la alfombra roja.
El atuendo con el que posa la actriz es ya toda una declaración de intenciones: un vestido de plumas de Ashi Studio y un sombrero de Philip Treacy, un estilo que recuerda a la malvada más seductora de la década de los 80. «Tengo 85 años pero me encuentro mejor que nunca«, asegura Joan en la publicación, en la que también aparece vestida con diseños de Giambattista Valli. En la entrevista, la británica elogia a Theresa May, desvela un reciente accidente de pilates y habla de varias celebrities, como su ahijada Cara Delevingne, de 26 años, o el cantante Liam Payne.
Entre sus últimos papeles, Joan ha interpretado a Hilda, una viuda de 86 años en el cortometraje Gerry, para el que tuvo que envejecer aún más para aparentar su edad real. También ha trabajado en la octava temporada de la serie de terror American Horror Story dando vida a la abuela del personaje de Evan Peters (Tate Landdon).
Casada con Percy Gibson, su quinto marido (22 años menor que ella), la británica debutó en el cine con 18 años en la película Lady Godiva Rides Again de 1951. Desde entonces apareció en numerosas películas, aunque no fue hasta los años 80 cuando la actriz ganó gran popularidad por la interpretación de la malvada y seductora Alexis Garrington en Dinastía”(1981-1989), un papel que le convirtió en uno de los rostros más populares de la televisión y que le otorgó un Globo de Oro, además de varias nominaciones al premio Primetime Emmy. Nombrada por la reina Isabel II de Inglaterra como miembro de la DBE, Collins presume de tener una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. No podía ser menos.
