Las pelirrojas más deseadas de Hollywood

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Aunque Amy Adams parezca pelirroja natural la actriz ha confesado que en realidad es teñida. "La primera vez que me teñí el pelo de rojo sentí que el resultado era muy natural. Yo era una rubia terrible. Creo que el pelo pelirrojo va mucho más con mi personalidad. Me siento como si hubiera nacido pelirroja", dice la actriz.

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Jessica Chastain, la pelirroja de moda a la que habréis visto en 'El árbol de la vida', asegura que cuando era adolescente no era nada fácil tener su pelo. "Mi adolescencia fue dura y se metieron mucho conmigo por pelirroja. No tuve novio hasta bien tarde y nunca fui al baile del instituto".

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Nicole Kidman tiene una relación de amor-odio con el color de su pelo y pasa largas temporadas de pelirroja hasta que de pronto se rebela y se tiñe de rubia.

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Tilda Swinton, que acaba de estrenar 'We need to talk about Kevin', es una de las pelirrojas más míticas de la industria. Aunque dependiendo de los papeles que esté interpretando a veces también se vuelve rubia.

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¿Existe una pelirroja más adorable que Julia Roberts? Fue una de las primeras y, para muchos, LA pelirroja por excelencia.

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Lindsay Lohan cambia de color de pelo como de bolso así que es difícil pillarla más de un par de semanas de pelirroja. Pero sí, como demuestran las fotos de cuando era pequeña su color natural es un bonito tono rojizo.

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Marcia Cross nos demostró en Melrose Place que las pelirrojas también pueden hacer de malas malísimas.

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Kate Walsh, a la que muchos recordaréis por su papel en Anatomía de Grey, dice que le encanta ser pelirroja porque "representa muy bien" su personalidad: "fuerte, graciosa y divertida".

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Isla Fisher intenta seguir los pasos que los maquilladores les acosenjan a las pelirrojas: huir de los tonos demasiado rosados o amarillos y apostar por la sombras que tengan un toque dorado.