Un 8 de diciembre como otro cualquiera. Cinco grados bajo cero en Nueva York, cinco meses de gestación para Kate Middleton y una jornada repleta de encuentros estelares. La visita oficial de los duques de Cambridge a EEUU tuvo una agenda de lo más significativa ayer. Llegada al mítico hotel Carlyle de Nueva York, cena benéfica con Hillary Clinton y su hija Chelsea en favor de la protección de la vida salvaje y la protección de elefantes y partido de los Nets en Brooklyn.
Una jornada que nos deja momentos como éste: la realeza británica y la de Brooklyn (Beyoncé y Jay Z viven en Brooklyn Heights) charlando animadamente en la pista del Barclays Center:
Kate (con chaqueta de Tory Burch) y William comiendo palomitas en el partido (Queen Bey estaba sentada justo en la grada de delante):
Camiseta de regalo para el pequeño George, entregada por el mismísimo LeBron James:
Y si William había pasado la mañana con Obama en Washington hablando sobre cómo se olvidó preguntar si había sido niño o niña cuando nació su primer hijo, por la tarde-noche él y Kate Middleton se encontraron a la posible futura presidenta de EEUU: Hillary Clinton
Un 8 de diciembre como otro cualquiera. Igualito que el del resto de los mortales.
