Ocho jabones de manos (baratos) que no resecan nada la piel

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Las manos limpias protegen de las infecciones. Lo dice la OMS: si siguiéramos a rajatabla sus directrices de higiene (una limpieza correcta, nada de tocarse la boca o la cara, y guardar distancia de seguridad con los demás) los casos de coronavirus serían muy inferiores. Y, sin embargo, no lo hacemos bien. Un estudio del gobierno estadounidense lleva dos años advirtiendo que el 97% de las veces nos lavamos mal las manos: lo hacemos poco tiempo, pocas veces y no nos secamos las manos con una toalla limpia. La OMS advierte: “El mundo ha sufrido un cambio irreversible: los patógenos multirresistentes han venido para quedarse. Para combatirlos son esenciales las medidas de prevención de las infecciones”. Y explica en una sencilla gráfica cómo lavarnos bien las manos: coger suficiente jabón, frotar a conciencia palmas, dorsos de manos y dedos, y pulgares, enjuagarse, secarse con una toalla de un solo uso, y utilizar esa toalla para cerrar el grifo. El apocalipsis no era como nos lo habían pintado y el pánico ha empezado a hacer ya caja: sin embargo basta con el gesto de higiene más mundano de todos para protegerse. Los geles antisépticos están agotados en muchas farmacias de todo el país ante el nerviosismo de quienes preguntan por ellos y, aunque son del todo eficaces en la desinfección, conviene recordar que el jabón de toda la vida también lo es. Así que hemos seleccionado diez jabones de manos que sí se pueden encontrar en supermercados, droguerías y boticas que no solo son válidos para una limpieza perfecta sino que además cuidan, hidratan y protegen la piel de las manos.

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Jabón de manos Nivea Creme Soft. Esta pastilla, en equilibrio con el pH de la piel, está enriquecida con aceite de almendras para añadir hidratación al ritual de la limpieza. A la venta en supermercados y droguerías.

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Pan fisiológico Lipikar, de La Roche Posay. Parece un jabón pero no lo es: este limpiador en barra limpia la piel sin agredirla, respetando su película protectora natural. Su fórmula contiene niacinamida (ingrediente activo calmante apto para pieles atópicas) y manteca de karité (conocida por su habilidad para restaurar el manto hidrolipídico de la piel con lípidos similares a los naturales) para ayudar a reparar la barrera cutánea. Se vende en farmacias y en droguerías como Primor.