El aceite de árbol de té que salvó la melena de Angelina Jolie cuando peor tenía el pelo

Si estos días el cuero cabelludo comienza a picar y el cabello está más débil, parte de la culpa la tiene el cambio de clima estacional. Los días se acortan y como recibimos menos luz solar que incide en nuestro sistema hormonal, también se reduce el nivel de estrógenos y el cabello se vuelve más débil. A las fluctuaciones climáticas propias del otoño hay que sumar la acumulación de productos de cuidado capilar que usamos, o las duchas con agua demasiado caliente o el uso de planchas y secadores que inevitablemente debilitan la melena. Esta situación se repite año tras año y en 2020 se le suma el efecto que la pandemia sanitaria está dejando sobre el cabello. Según las últimas estadísticas de Google Trends, la caída del pelo como síntoma de Covid está entre las búsquedas más frecuentes estos días en los que el estrés acecha y la incertidumbre nos rodea.

Cuando el ciclo capilar está alterado se debe buscar una solución efectiva que trate el problema y hacer acopio de productos formulados con ingredientes que fortalezcan e hidraten. Uno de los infalibles es el árbol de té, un gran aliado para el pelo. Su popularidad se debe a que es económico, muy eficaz y multiusos. Más allá del extendido uso contra los piojos, ayuda a controlar el exceso de grasa y también actúa como una auténtica crema hidratante sobre los cueros cabelludos más deshidratados.

Este ingrediente salvó la melena de Angelina Jolie, que cuando interpretaba su papel en la película Maléfica: Maestra del Mal, notó cómo su larga cabellera quedó debilitada. Las consecuencias de las intensas jornadas de grabación con el pelo recogido bajo los cuernos especialmente diseñados para el personaje, provocaron que el pelo de la actriz durante el rodaje se mostrara frágil, sin vida y con problemas de crecimiento. Según contó su estilista Audrey Futterman a la revista InStyle, para recuperar el pelazo de la actriz, durante un mes le aplicó por la mañana, a mediodía y por la noche aceite de árbol de té de la marca Hask. “El aceite de árbol de té tiene propiedades antibacterianas y antioxidantes que ayudan en la salud del cuero cabelludo y el cabello, al mismo tiempo que nutre las raíces”, explica a S Moda Tyler Suhre, del departamento de marketing de la firma cosmética cuya colección Tea Tree & Rosemary Oil acaba de presentarse en España y se vende por un precio de 7,99 euros cada bote. “Con esta línea capilar, que también lleva romero, se busca aliviar el cuero cabelludo e hidratar todo tipo de cabello”, añade Suhre.

Además, junto a la acción revitalizante del champú y el acondicionador que Futterman usó para calmar el cuero cabelludo y cuidar hebras deterioradas de la melena de Jolie, la especialista en belleza aplicó un acondicionador intensivo para reparar las puntas abiertas gracias a la acción del aceite de argán de Marruecos. Este ingrediente recibe el sobrenombre de “oro líquido” y se produce a partir de las nueces de la fruta Argania spinosa que solo crece en el país africano. Hask lo formula en un producto que penetra profundamente en la fibra capilar y repara el pelo desde el interior para que se mantenga más fuerte, suave e hidratado. Desde la firma recomiendan masajearlo en las áreas dañadas una o dos veces por semana y dejarlo actuar durante 10 minutos. Después del aclarado, la melena recupera su aspecto saludable.

Futterman reconoció que Jolie quedó encantada con la efectividad de los champús y acondicionadores, pero no es la única. Así lo asegura Suhre: “Los productos de Hask son el secreto mejor guardado de Hollywood, ya que se han utilizado en más platós de cine y televisión que cualquier otra marca de cuidado de cabello. Ayudan a tratar, reparar y devolver la vida al pelo de las actrices durante los días largos y agotadores en el set de producciones de estudio como las series The morning show, La Maravillosa señora Maisel o la película ¿No es romántico?”. Son muchos los estilistas que han declarado su predilección por los cosméticos de esta firma que aboga por el clean beauty. Como proclama Suhre, su misión es “crear un cuidado del cabello de alta calidad que se obtiene cuidadosamente, se prueba su eficacia y se formula sin las cosas malas (incluidos: sulfatos, parabenos, ftalatos, gluten y almidón de aluminio)”.