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Los labiales permanentes, por fin una realidad. La promesa del maquillaje duradero en los labios se dibuja en el horizonte esperanzando a las usuarias. Los tiempos piden fórmulas resistentes a la jornada. "Si se sella el producto, se volverá a prueba de transferencias, como besos o comidas", garantiza Gema Aznar, directora general de Mary Kay España. Eso sí, el efecto no es inmediato: conseguirlo requiere de la paciencia de la clienta. "Se debe mantener la boca abierta durante unos segundos mientras el sellador se asienta, para que no se pase en el proceso de un labio a otro", recomienda Aznar. La fórmula de tinta líquida evita que se resequen o cuarteen los labios, y permiten cubrirlos por completo de una sola pasada. Para asegurar su fijeza sin productos específicos, las fórmulas deben llevar polímeros que formen una película protectora. Para retirarlo, mejor productos diseñados para ese fin y con bases oleosas. Arriba, Super Stay Matte Ink de Maybelline
(9,99 €) y laca de labios de Mary Kay (38 € el set, incluye un sellador y un borrador).