Lima, Del Arco y Sanzol revisitan las tragedias griegas

El próximo 21 de abril se estrenará Antígona, la primera de las tres tragedias griegas, junto a Medea y Edipo Rey, que ha montado el Teatro de la Ciudad. Esta agrupación formada por Miguel del Arco, Alfredo Sanzol y Andrés Lima «es una cooperativa con una voluntad, por parte de todos, de sacar adelante un espacio donde poder investigar», cuenta del Arco. Se han unido las productoras de los tres directores, los equipos técnicos y artísticos, se han bajado todos el sueldo, incluyendo las primeras figuras como Aitana Sánchez-Gijón o Carmen Machi, y han realizado ocho talleres de experimentación en el Teatro de la Abadía. Todos abiertos al público. «Queremos que el acto de creación no sea individual sino compartirlo con la ciudad. Que el teatro no sea solo entretenimiento sino alimento sociocultural inmediato», dice Lima. Y tanto es así que habilitarán una sala como bar para que el espectador acuda antes y después de la función. «La idea es recuperar el concepto de ágora como punto de reunión», apunta del Arco. «Después de tanta tragedia ahí nos reiremos un rato. Será un happening donde estará presente todo el equipo artístico para charlar con el público. El espacio sagrado no está exento de placer. Puede estar lleno de dioses y, al mismo tiempo, de borrachos», comenta.

¿Por qué volver a los clásicos? Los tres responden que son universales. «La tragedia está en el origen del teatro occidental y como estábamos iniciando algo era idóneo», explica Sanzol. «Yo no pienso en clásicos porque las situaciones que te plantea Medea te las encuentras a diario en tu pareja, en tu relación con el mundo y en la zona más oscura del deseo del ser humano. Es algo contemporáneo», dice Lima, que estrena esta obra el 23 de abril. El día 24 será el Edipo Rey de Sanzol el que se pueda ver por primera vez y en el mismo lugar. «Los tres montajes comparten escenografía e iluminación. Hemos puesto a dialogar a los técnicos hasta conseguir el resultado esperado», cuenta el director.

Antes de su estreno ya se han vendido bastantes entradas. «Pero hay que llenar para que pueda ser sostenible», concreta Lima.