McKayla Maroney, de gimnasta viral en Londres 2012 a estrella de Instagram

«Aquella chica que se cayó en los Juegos Olímpicos». Con esta frase se autodefine en Instagram McKayla Maroney, la gimnasta que se hizo viral en los Juegos Olímpicos de 2012 tras torcer el gesto al recibir la medalla de plata en salto de potro. Su cara de desgana fue bautizada como ‘McKayla is not impressed’ (McKayla no está impresionada) y el meme recorrió Internet. Maroney, formaba parte del equipo estadounidense que, durante los Juegos de Londres, fueron apodadas «Fierce Five» (algo así como las ‘cinco feroces’ en homenaje a la serie Los Siete Magníficos). La joven acaparó titulares en aquel momento por su ejercicio perfecto pero, sobre todo, por culpa de su desafortunada caída en la final y su posterior mueca viral que la catapultó a la fama. El Tumblr McKayla is not impressed publicó infinitas bromas photosepeando la cara de la gimnasta en toda clase de situaciones: al lado de Usain Bolt, en la boda de los duques de Cambridge o visitando la muralla China. La joven, que tenía 16 años por aquella época, se tomó con humor las mofas interneteras e incluso se paseó por los platós televisivos bromeando al respecto y no dudó en posar junto a Obama torciendo el morro.

Cuatro años después de su momento de gloria su nombre vuelve a los medios de comunicación a pesar de que no compite en Río (del equipo de las cinco gimnastas solo dos –Gabby Douglas y Aly Raisman– han competido). El pasado mes de febrero Maroney anunció que dejaba la gimnasia de forma profesional y parece que está centrando sus esfuerzos en convertirse en una celebridad fuera del deporte. Ya es toda una estrella en las redes sociales (tiene más de 500.000 seguidores en Twitter y supera el millón en Instagram) y hace poco anunció a sus seguidores que está preparando su carrera musical. Más allá de por sus pinitos en la actuación y por ser una de las protagonistas del ‘celebgate’ que afectó a varias famosas hace un par de años, su nombre ha vuelto recientemente a protagonizar decenas de artículos que analizan su espectacular cambio físico en estos años y especulan con la posibilidad de que haya pasado por el quirófano para lograrlo. Ella siempre lo ha negado e incluso publicó una foto en su perfil en la que afirmaba de forma irónica que no se había hecho ningún retoque. Cosa que no la librado de ser comparada con Kylie Jenner, hermana pequeña del clan Kardashian, con la que muchos han afirmado que tiene cierto parecido físico.

Más allá de su incierto futuro musical, todo apunta a que sus selfies y poses seguirán acumulando miles de likes, algo que no sentaba bien cuando todavía estaba compitiendo. «Todos estaban en plan: ‘para, para de publicar fotos subidas de tono en Instagram que no te van a ayudar en tu carrera deportiva'», confesó en una entrevista al podcast GymCastic. Ahora, liberada del lado más estricto de su carrera deportiva, Maroney confiesa que no dejará del todo la gimnasia aunque no compita de forma profesional. Sus esfuerzos, sin embargo, se centran en tomar clases de canto. ¿Veremos pronto a esta atleta viral convertirda en la nueva sensación musical?

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