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Así bailaron ‘My way’ Donald Trump y Melania (a pesar de la oposición de Nancy Sinatra)

El matrimonio presidencial bailó por primera vez como presidente y primera dama al ritmo de la famosa canción popularizada por Frank Sinatra interpretada por tres artistas de Nashville.

President Donald Trump with his wife Melania and Vice President Mike Pence with his wife Karen dance at the Armed Services Ball
Cordon Press (REUTERS / Cordon Press)

Elton John no quiso actuar para Trump. Tampoco Justin Timberlake, ni Katy Perry ni Bruno Mars. Ni siquiera Kanye West, que mantiene una relación cercana con el presidente, cantaron en la famosa gala inaugural que tuvo lugar ayer en el Washington Convention Center. La lista de artistas que han declinado la propuesta de actuar en la ceremonia es bastante abultada pero Donald Trump y Melania cumplieron la tradición de bailar por primera vez como presidente y primera dama acompañados por las notas de My Way, canción popularizada por Frank Sinatra.

El cantante de jazz Erin Boehme y otros dos artistas –un hombre y una mujer– de Nashville fueron los encargados de interpretar el famoso estribillo (I did it my way –Lo hice a mi manera–). «Lo hicimos. Comenzamos este viaje y dijeron que no tendríamos ninguna oportunidad, pero sabíamos que ibamos a ganar y ganamos», dijo Trump al llegar al baile. Junto a la nueva primera dama, que llevó un vestido palabra de honor diseñado por Hervé Pierre (antiguo director creativo de Carolina Herrera) y ella misma, bailó también al ritmo del gran éxito de Whitney Houston, I will always love you. Tanto el vicepresidente Mike Pence, como su hija Ivanka (con una pieza de Carolina Herrera color ‘champagne’) y el resto del cabinete, les acompañaron pocos segundos después en la pista.

Trump y la nueva Primera Dama, que apareció con un vestido diseñado por ella misma en colaboración con Hervé Pierre.
Trump y la nueva Primera Dama, que apareció con un vestido diseñado por ella misma en colaboración con Hervé Pierre.Cordon Press (REUTERS / Cordon Press)
Momento en el que Ivanka Trump y su esposo Jared Kushner se unen al baile.
Momento en el que Ivanka Trump y su esposo Jared Kushner se unen al baile.Cordon Press (REUTERS / Cordon Press)

A Nancy Sinatra no le ha hecho demasiada gracia que la canción de su padre suene en la ceremonia. «Solo recuerden la primera línea de la canción», escribió en su cuenta de Twitter. La hija del intérprete se refería al verso «And now, the end is near» (y ahora, el final está cerca). Sin embargo, tras un titular de CNN que decía: Nancy Sinatra is not happy Trump will use her father song at inauguration (Nancy Sinatra no está contenta con que Trump use la canción de su padre), la cantante se apresuró a contestar en su perfil: «Eso no es cierto. Nunca he dicho eso. ¿Por qué mientes CNN?».

Muy diferente fue el primer baile de Barack Obama y Michelle Obama en 2009. El matrimonio bailó por primera vez como presidente y primera dama al ritmo de At Last de Etta James versionada por Beyoncé. Aquella noche otros artistas como Jay Z, Mariah Carey, Alicia Keys, Mary J. Blige o Stevie Wonder también actuaron en la ceremonia. Cuatro años después, en la segunda investidura de los Obama como presidentes, Beyoncé regresó para interpretar The Star-Spangled Banner, el himno de Estados Unidos, y las actuaciones de James Taylor y Kelly Clarkson amenizaron la velada.

El poder de convocatoria de Trump parece mucho menor. A la lista de artistas que han rechazo actuar en la ceremonia se suma la polémica que hace unos días protagonizó al utilizar una canción de los Rolling Stone para cerrar su primer discurso como presidente. La grabación original de You can’t always get what you want, canción de 1969, compuesta por Mick Jagger y Keith Richards, empezó a sonar nada más acabar el discurso. Poco después Mick Jagger, escribía en su Twitter un mensaje irónico: «Estoy ahora viendo las noticias. A lo mejor me piden que cante You can’t always get what you want. Ja…». El conflicto entre ambos ya venía de lejos. Trump utilizó varios de los temas del mítico grupo durante la campaña electoral y Rolling Stones le pidieron que dejara de hacerlo. «Los Rolling Stones no han dado permiso a Trump para utilizar sus canciones. De hecho, le hemos pedido que no las utilice más». Pero a Trump parece que le ha dado igual porque ha seguido poniéndolas. El jukebox del republicano promete seguir sorprendiendo.

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